La Real se impone en un derbi en el que el Isak y el gran ambiente de la grada fueron los protagonistas. Los txuriurdin, que merecieron la victoria, tuvieron que trabajar duro durante los 90 minutos ante un buen Athletic en defensa, pero falto de ideas en ataque. Con esta victoria, la Real cierra una semana redonda en la que, además de conseguir el pase a semifinales de copa, se hace con tres puntos muy importantes en un partido clave.
Ambos onces iniciales incluían muchas rotaciones, sobre todo en el Athletic, donde rotaban hasta siete jugadores respecto a su once titular. En la Real entraban en la alineación Zaldua, Aihen, Sangalli, Portu y Willian José, respecto al equipo titular del Santiago Bernabéu. Willian José se encontraba ante una gran ocasión para poder demostrar a la grada que de verdad está implicado con el equipo y recuperar su mejor versión. Por otro lado, Odegaard no llegó finalmente a entrar en la convocatoria arrastrando los problemas que sufrió en el partido copero.
En la primera mitad la Real generó todo el peligro. La acción más clara la tuvo Portu, que con un buen disparo cruzado trató de anotar el primer gol de la tarde, pero Unai Simón respondió con una gran parada. El Athletic, sin ideas, no creó apenas peligro y se centró en mantener su portería a cero, tratando de aprovechar alguna contra con la velocidad de Villalibre, que tuvo sus más y sus menos con Le Normand. En el equipo donostiarra lo más destacable llegó por mediación de Mikel Merino, que a pesar de no estar tan acertado como en los últimos encuentros, cuajó unos muy buenos 45 minutos dando fluidez a la salida de balón.
Tras el descanso, el equipo volvió a salir muy enchufado, como nos tiene acostumbrados en los últimos partidos, pero no encontraba soluciones arriba, lo que hizo que Imanol sustituyera rápidamente a Willian José por Isak. El joven sueco dio un vuelco de 180 grados al partido, desatascando el encuentro y creando en menos de cinco minutos dos claras acciones de gol, que no anotó por muy poco. Minutos más tarde, se inventaba un recurso sensacional en el área rival para asistir a Portu y que anotara el primero de la tarde.
La grada, que estallaba, no pudo celebrar mucho el gol del murciano ya que a los cinco minutos Iñaki Williams, tras previo error de Guevara hacía el empate. Guevara, que recibió algún tímido pito al ser sustituido, erró perdiendo el balón y quizás, pudo haber cortado la jugada con una falta táctica sobre Williams posteriormente a la pérdida, pero de ahí a pitarle… Un chaval que viene de abajo, capitán del Sanse, que ha jugado grandes partidos a lo largo de la temporada e incluso ha llegado a quitarle el puesto a Zubeldia durante varias jornadas, no merece ni mucho menos dichos pitos.
Durante los últimos minutos del encuentro el Athletic daba por bueno el punto a domicilio, pero la Real no se conformaba ni mucho menos. En el 83′ Januzaj, que parece que vuelve ha estar implicado con el equipo, filtraba un gran balón entre líneas para que Portu asistiese de tacón a Isak, que volvía a marcar, dando la victoria a los txuriurdin y sumando su octavo gol en los últimos seis partidos. Increíble el estado de forma del sueco, que ha hecho que se convierta en el gran ídolo txuriurdin, haciendo cantar a la grada continuamente su ya famoso cántico. Esperemos que el Borussia Dortmund esté ocupado con su nuevo delantero y no se acuerden de la opción de recompra que podrán ejercer a partir de verano.
La cara más amarga del derbi fue la entrada de Iker Muniain sobre Mikel Oyarzabal, que fruto de la desesperación, se llevó con los tacos por delante al de Eibar. El arbitro no dudó en expulsarlo de inmediato y lo que podría haber sido una lesión muy fea, parece que queda tan solo en un susto.
El Reale Arena, con récord de asistencia, fue el jugador número 12 y así lo ha reflejado Imanol en rueda de prensa, pidiendo el mismo apoyo de cara al jueves frente al Mirandés. Todo aficionado txuriurdin vive un momento único ahora mismo, habiendo eliminado al Real Madrid en su propio feudo y ganando el derbi en menos de cuatro días. Ahora es momento de apoyar al equipo al máximo el jueves, en el que probablemente sea el partido más importante que ha jugado la Real en los últimos años. El partido de vuelta en Anduva no será nada fácil, por lo que debemos de sacar un buen resultado en casa. Como decía el gran Martín Lasarte «no se desunan, todos juntos pueden lograr muchas cosas».