Desde ayer, lunes, los denominados «hondartzainak» se encuentran en los accesos a La Concha para controlar los accesos a la playa y para cambiar los banderines que indicarán en todo momento el aforo del lugar.
Los banderines están en funcionamiento junto a la primera rampa en la zona de Plaza Cervantes, en la rotonda de los Relojes y en el acceso junto al Eguzki. El banderín verde indica que el acceso no está restringido, que hay aforo disponible; el amarillo que la playa empieza a llenarse o que se acerca la pleamar; y el rojo que el aforo está completo o que es la hora de pleamar.
En el resto de playas la información se dará a través de la web del Ayuntamiento. El aforo se controlará con las cámaras que medirán el espacio disponible o mediante la app de Diputación.