El informe presentado por el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea ha alertado de que el trazado ferroviario francés que conectará con la Y vasca no arrancará antes de 2037. Asimismo, ha advertido de que el diseño actual de la infraestructura tiene una capacidad «demasiado baja» para el tráfico de mercancías.
Por lo tanto, los auditores destacan en su informe que la media de retrasos de las grandes obras europeas analizadas es de 11 años y el sobrecoste del 47%.