Continúan las negociaciones en la cumbre europea relativa al COVID-19. Tras varios días sin llegar a ningún acuerdo, el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, ha puesto sobre la mesa sus exigencias para aprobar el fondo europeo de recuperación.
Rutte aceptaría que buena parte de ese fondo se destine a subsidios, no obstante, exigiría como contrapartida unas “garantías absolutas” sobre las reformas que acometerán los países beneficiados, como España e Italia, a cambio de las multimillonarias ayudas. Concretamente ha citado las reformas en las de pensiones y mercado laboral.
Los jefes de Estado y de Gobierno intentarán desbloquear la negociación esta tarde, cuando e contarán con un nuevo borrador de compromiso preparado por el presidente del Consejo europeo.