El sindicato LAB afirmó ayer ante la jueza que dirige la causa de las presuntas irregularidades en la OPE de Osakidetza de 2018 que el Servicio Vasco de Salud «conocía lo que estaba sucediendo y no hizo nada para pararlo», es más «intentó perfeccionar el sistema de reparto de plazas discrecional».
Se reactiva así la investigación judicial en la que ya declararon como investigados los jefes médicos de Anestesiología, Angiología y Digestivo, que negaron ya hace un año «toda participación» en los hechos.
Hasta el momento están suspendidos de manera cautelar 13 procesos selectivos: Neurofisiología, Neurocirugía, Anestesia, Angiología, Digestivo, Cardiología, Traumatología, Cirugía Plástica, Urología, Medicina Intensiva, Urgencias, Microbiología y Cirugía Cardiovascular.