El Reino Unido ha aprobado la autorización de uso para la vacuna de Pfizer-BioNTech contra la COVID-19 y será el primer país del mundo en suministrarla, a partir de la semana que viene.
Los resultados de los test masivos de esta vacuna mostraron una eficacia del 95%. Entre las personas prioritarias para recibir la vacuna figuran los ancianos, especialmente quienes viven en residencias, personal sanitario y ciudadanos considerados vulnerables.