Con seis votos a favor y cinco en contra, el Pleno del Tribunal Constitucional ha aprobado una sentencia que establece que los ataques a la bandera de España no están amparados por la libertad de expresión y, en consecuencia, son delito.
El fallo de la sentencia desestima así el recurso de amparo presentado por Pablo Fragoso, dirigente de la Confederación Intersindical Galega, que instó a quemar la «puta bandera» de España durante una manifestación ante el Arsenal Militar de Ferrol en 2014.