El ejecutivo de Pedro Sánchez se gastó en 2020, año de la pandemia, 807 millones de euros en pluses de «productividad» y «gratificaciones» a trabajadores de la Administración General del Estado, un 10% más de lo presupuestado, según ha revelado el diario El Español.
El Gobierno destinó 73 millones de euros más de lo previsto en «gratificaciones». La partida inicial para cubrir este capítulo era de 41 millones, pero acabaron destinándose 114.583.957 euros.
Para compensar ese gasto habrá que reordenar partidas de los Presupuestos, detrayendo cantidades de otros capítulos, o tendrá que recurrirse al Fondo de Contingencia, creado para cubrir gastos «imprevisibles» o «urgentes». De otra forma, esa cantidad pasaría a engrosar el déficit.