Tras conocer que el pasado 21 de abril Marlaska, Iglesias y Gámez recibieron sendas cartas con amenazas y cartuchos de bala en su interior, Correos ha abierto un expediente a la empresa subcontrata responsable de la calificación y escaneo de la correspondencia por no detectar las amenazas.
Además, la compañía ha solicitado la retirada «inmediata» del servicio de Correos del vigilante de seguridad por ser la persona que operaba el equipo reseñado en el momento en el que las tres misivas pasaron por la inspección radiológica que determinan los procedimientos de seguridad de Correos, «sin que fuera capaz de identificar los proyectiles que portaban».