En respuesta a las nuevas necesidades generadas por la pandemia, la Diputación, a través de Uliazpi, abrió ayer un nuevo recurso para fines de semana y periodos vacacionales.
El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, visitaron ayer por la mañana el nuevo recurso de respiro destinado a personas menores y jóvenes con discapacidad intelectual y del desarrollo, ubicado en el barrio donostiarra de Riberas de Loiola. Estuvieron acompañados en el encuentro por la gerente de la Fundación Uliazpi, Arantza Aguiriano, con quien pudieron conocer de primera mano la nueva instalación y el servicio que se ofrece a menores y jóvenes con discapacidad y a sus familias.
Se trata de una unidad independiente que proporciona estancias temporales los fines de semana y periodos vacacionales. «Unas estancias de respiro que resultan muy necesarias tanto para las personas más jóvenes como para sus familias, y que han tenido que ser adaptadas a la nueva realidad impuesta por la COVID-19”, explicó el diputado general. Antes de la irrupción de la pandemia, Uliazpi ofrecía este servicio en los recursos de Ulitxiki y Villa Josetxo, sin embargo, “a consecuencia de la pandemia y de la necesidad de cumplir los protocolos sanitarios establecidos, ha sido uno de los servicios más difíciles de mantener, por las lógicas sectorizaciones y la creación de burbujas de convivencia”.
Desde el pasado mes de marzo, sin embargo, con el objeto de superar las mencionadas dificultades, se ha habilitado una vivienda específica destinada exclusivamente al programa de respiro que da respuesta a 20 familias, en grupos de 3 y 4 menores y jóvenes cada fin de semana. “Se trata de un servicio muy apreciado y solicitado por las familias, ya que les da el apoyo y respiro que necesitan”, explicó Olano. Una vez finalizado el curso escolar, según informó, se organizarán periodos más prolongados durante las vacaciones para seguir dando descanso a las familias.
Uliazpi ofrece el servicio de respiro desde el 2009, y en 2019 fueron 17 las familias beneficiarias de este progama y se realizaron un total de 320 estancias. La Diputación y Uliazpi, por tanto, en respuesta a las necesidades de las familias, han dispuesto una nueva unidad independiente en Riberas de Loiola, para recuperar el servicio de respiro “con todas las garantías sanitarias respecto a la COVID-19”.
Durante la visita, el diputado general señaló que Uliazpi ha “reinventado” el servicio de respiro para “responder de manera más adecuada a las necesidades de las familias y de las personas menores y jóvenes con discapacidad intelectual”. Y añadió que «la atención que presta Uliazpi es el claro ejemplo de la manera de hacer del modelo social de Gipuzkoa: una atención centrada en la persona, sea cual sea su perfil, edad o necesidad”. “El conjunto del sistema de servicios sociales de Gipuzkoa, con sus trabajadores y trabajadoras a la cabeza, está dando lo mejor de sí para mitigar los efectos de la pandemia en los colectivos más vulnerables de nuestra sociedad, así como en sus familias, tal y como deja patente este nuevo recurso habilitado por Uliazpi. Seguiremos trabajando decididamente en ese empeño, ante las necesidades que puedan surgir también en los próximos meses”, refrendó el diputado general.
Por su parte, Arantza Aguiriano explicó que se está produciendo un repunte en la demanda de servicios de vivienda y, sobre todo, de estancias temporales o de respiro para personas menores como de jóvenes, lo que ha motivado la transformación de los servicios ofrecidos por Uliazpi, con el fin de dar una respuesta “óptima” a las nuevas necesidades que están surgiendo.
Más de 30 años atendiendo a personas con discapacidad intelectual
La Fundación Uliazpi está adscrita al Departamento de Políticas Sociales de la Diputación Foral de Gipuzkoa, y lleva más de 30 años proporcionando, desde la eficiencia y la innovación, “una respuesta integral y personalizada” a personas con discapacidad intelectual y a sus familias en Gipuzkoa. Las personas usuarias de Uliazpi tienen como característica común su discapacidad intelectual y sus necesidades de apoyo. Además, pueden presentar también trastornos y/o problemas tales como trastornos del espectro autista, discapacidades sensoriales, motoras, trastornos mentales, problemas de salud, etc.
Aunque Uliazpi como organismo autónomo de la Diputación Foral de Gipuzkoa se creó en 1989, Aguiriano detalló que los servicios y la atención a personas con discapacidad intelectual comenzó en la década de los 60 en Gipuzkoa, de la mano de un grupo de familias que se unió para luchar en favor de los derechos de las personas con discapacidad intelectual, la actual Atzegi.
Actualmente, en los seis centros que gestiona la Fundación Uliazpi, en Zizurkil, Hondarribia, Bergara, Eibar y dos en Donostia, se atiende a un total de 380 usuarios y familias, y cuenta con 223 plazas de vivienda y 299 plazas para la atención diurna.