El Acuerdo de Marco de 91,4 millones de euros para “dar continuidad al sostenimiento” de tres flotas de aeronaves del Ejército del Aire, entre las que se encuentran los cinco Falcon 900 y los dos Airbus A-310 utilizados por el Gobierno y la Casa Real, ha sido aprobado por el Consejo de Ministros.
El Ejecutivo ha justificado la partida defendiendo que es necesario “asegurar la disponibilidad operativa” de estos aparatos, destacando que realiza, entre otras “misiones significativas” las operaciones de “evacuación de no combatientes y repatriación de bajas; el transporte de tropas desplegadas en operaciones; fotografía aérea y la calibración en vuelo de ayudas a la navegación aérea”. Por el contrario, no se han pronunciado sobre los viajes VIP de autoridades.
La decisión ha sido muy criticada por la incoherencia que supone tener esta flota lista y disponible para el Gobierno las 24 horas del día, cuando recientemente el Ejecutivo socialista propuso acabar con los vuelos cortos por contaminantes.