Ertzaintza y policías locales tuvieron que actuar la madrugada del pasado sábado en varias localidades guipuzcoanas para hacer cumplir la normativa sanitaria vigente establecida para luchar contra la pandemia.
Los primeros incidentes se registraron a la una y veinte de la mañana en Azkoitia, cuando un agente de la Ertzaintza fue agredido con el lanzamiento de una lata de cerveza mientras patrullaba en un vehículo policial. El presunto agresor no pudo ser localizado, ya que abandonó rápidamente el lugar de los hechos escondiéndose entre la muchedumbre.
Por otro lado, vecinos de Deba alertaban a las cuatro menos cuarto de la madrugada de la celebración de un botellón en la playa de la localidad. Recursos policiales se trasladaban al lugar y procedían a informar por megafonía del incumplimiento de las medidas establecidas. Poco después, patrullas de la Guardia Municipal de Donostia-San Sebastián sufrían el lanzamiento de vasos y botellas mientras acudían a un incidente en la Plaza Trinidad de la Parte Vieja. Durante estos incidentes se produjo un enfrentamiento entre dos grupos de personas, donde una de ellas sufrió heridas en una mano. Finalmente la actuación de varias patrullas de la Ertzaintza logró disolver los enfrentamientos y desalojar a los alborotadores.
