El Gobierno de Italia ha anunciado que aprobará una reforma fiscal que incluya una bajada de impuestos para impulsar un crecimiento estructural en el país. Tal y como ha anunciado el ministro italiano de Economía, Daniele Franco, «la reforma fiscal se centrará en mitigar la presión fiscal y en rebajar el impuesto sobre la renta de las personas físicas» para potenciar el empleo y ayudar «al país a crecer en el medio y largo plazo en la medida de lo posible».
Franco reconoce que no hay «varitas mágicas» para salir de la crisis derivada de la pandemia, pero defiende que uno de los factores cruciales será la correcta aplicación del Plan de Recuperación, que tiene una dimensión total de más de 200.000 millones de euros y que se financiará con 191.500 millones de euros que Italia recibirá del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia europeo y más de 30.000 millones de recursos propios.