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Real Sociedad y Athletic Club se repartieron los puntos en el derbi vasco que se
celebró el pasado 31 de octubre en el Reale Arena. Bajo una intensa lluvia, el
partido fue creciendo en juego e intensidad desde el principio hasta el final de un
encuentro que tuvo de todo, desde dominio alterno, goles, una expulsión y un fallo
clamoroso que decidió el resultado de este atractivo encuentro en el que las
aficiones volvieron a dar un nuevo ejemplo de respeto y cercanía.
Llegaba la Real Sociedad con la posibilidad de ponerse líder de la liga en solitario,
y por lo tanto, favorita al triunfo en este encuentro según las mejores apuestas de
bet365, y aunque el resultado al final de empate fue lo más justo, a punto estuvo el
equipo de Imanol Alguacil de saborear una victoria ante el eterno rival y destacarse
todavía más en la clasificación que encabeza su equipo, eso sí, con un partido más
que Real Madrid, Sevilla y Atlético de Madrid, que están justo detrás en la tabla
clasificatoria.
El Athletic Club de Bilbao por su parte afrontaba el encuentro en una buena
dinámica de resultados haciendo honor a la media inglesa, consistente en vencer en
casa y empatar lejos de San Mamés, y cumplió con sus pronósticos arrancando un
empate en el último minuto gracias a una falta botada por Muniain y a
la colaboración de un Álex Remiro que no estuvo acertado para despejar el
esférico, que acabó alojándose en la red para neutralizar el tanto de penalti que
había transformado Alexander Isak en el minuto 58 de encuentro.
Álex Remiro y su herida con el Athletic
La última Final de la Copa del Rey de fútbol entre estos dos equipos se resolvió a
favor de la Real Sociedad, y Álex Remiro, guardameta de la Real Sociedad y
exjugador del Athletic Club, lo celebró haciendo una burla a Iñaki Williams en la
cámara del club rojiblanco. Esto no sentó nada bien a los futbolistas del Athletic,
que cuando hicieron pasillo de honor a la Real, no saludaron al portero a excepción
de Iker Muniain, que por respeto si lo hizo.
Curiosidades de la vida, en este último enfrentamiento el Athletic encontró premio
en un fallo de Álex Remiro a un disparo de Iker Muniain. Como si de un capricho
del destino se tratara, el Karma le jugaba una mala pasada al portero realista y
premiaba a la vez la buena conducta del capitán del Athletic, firmando un empate
que a la postre fue definitivo.
Y es que lo mejor en el fútbol y en la vida es aceptar las cosas tal y como vienen y
seguir tu camino, porque la vida da muchas vueltas y nunca sabes que te deparará
el destino. Lo que es seguro es que el último derbi dejará huella y los dos equipos
vascos seguirán sus caminos hasta que el calendario los vuelva a enfrentar en otro
encuentro del que, seguro que volverán a saltar chispas en el terreno de juego,
mientras que la afición disfrutará como ha hecho siempre desde el respeto y la
cercanía que tienen estos seguidores.