Un convenio suscrito entre el Departamento de Trabajo y Empleo y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones permitirá que 300 personas desempleadas de larga duración y que perciben el Ingreso Mínimo Vital y/o la Renta de Garantía de Ingresos participen en proyectos piloto para su inclusión sociolaboral en Euskadi.
Con un presupuesto de 6,5 millones de euros procedentes de fondos europeos, Lanbide alcanzará convenios de colaboración con entidades locales de veinte municipios o comarcas en las que se ha detectado un alto índice de paro de larga duración. Así, se pondrán en marcha veinte proyectos mixtos de empleo-formación, acompañados de itinerarios personalizados de orientación profesional. Estos proyectos mixtos serán promovidos o liderados por entidades locales y desarrollarán acciones de acompañamiento integral para conseguir o mejorar la inclusión social y laboral de las personas participantes que se encuentran en situación o en riesgo de exclusión social y que, como consecuencia del impacto económico provocado por el Covid-19, han visto agravada su situación.
Los proyectos, en cada uno de los cuales tomarán parte quince personas, tendrán una duración de 12 meses y deberán iniciarse antes del próximo 1 de junio. Estarán divididos en dos fases, una primera de al menos dos meses exclusivamente formativa, y una segunda de contratación en la modalidad de contrato para la formación y el aprendizaje que podrá comenzar una vez realizado al menos el 75% del programa formativo, siempre que se puedan compatibilizar ambas actividades.