El nuevo cuadro de cotización variable a la Seguridad Social que el Gobierno prevé aplicar a partir del año que viene en función de los ingresos obtenidos no termina de convencer. Actualmente España cuenta con las cuotas más elevadas de Europa y, de salir adelante la reforma tal y como está planteada, un autónomo en España pagará dos veces más que lo que pagan los trabajadores por cuenta propia de Francia o Alemania, y tres veces más que los británicos.
No obstante, los autónomos en España gozan de una mayor protección que la que tienen los trabajadores por cuenta propia en el resto de Europa. Tras las últimas reformas, en España tienen acceso a las prestaciones por jubilación, baja por maternidad y paternidad, accidente laboral o cobertura por desempleo, algo con lo que no cuentan en otros países europeos.