Tras detectar un aumento inusitado de clientes que compran grandes cantidades de aceite de girasol, cuyo principal proveedor es Ucrania, algunos supermercados han tomado la decisión de limitar su venta para evitar el acopio descontrolado de este producto y su consiguiente desabastecimiento en las tiendas. Eroski, Mercadona y Makro se encuentran entre los establecimientos que han tomado dicha medida.
Así lo ha comunicado la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS): «Algunas empresas de distribución alimentaria están adoptando medidas de limitación de venta de aceite de girasol debido al comportamiento atípico del consumidor que se ha producido». No obstante, también ha enviado un mensaje de tranquilidad recordando que «existen alternativas tanto de origen como de producto», al mismo tiempo que ha apuntado que España es el primer productor mundial en varias de las familias de productos que integran las categorías de grasas vegetales.