Cientos de gasolineras han aprovechado la bonificación de 20 céntimos por litro anunciada recientemente por el Gobierno de España para aplicar una subida de precios equivalente a la rebaja. Por lo tanto, en dichos casos el consumidor no notará el beneficio de las ayudas, mientras que las gasolineras se enriquecerán a costa de las subvenciones.