La mascarilla dejará de ser obligatoria en espacios interiores a partir del próximo día 20 de abril, pero la nueva normativa tendrá sus excepciones y el uso de este elemento seguirá siendo obligatorio en los centros sanitarios, en los centros sociosanitarios y en el transporte público.
Además, las autoridades recomiendan continuar utilizando la mascarilla en espacios cerrados en los que la distancia interpersonal es de menos de metro y medio y no se garantice una ventilación adecuada, ya sea en el ámbito laboral, en centros comerciales, supermercados, cines, museos, restaurantes, bares o locales de ocios nocturno, e incluso en el entorno familiar o reuniones privadas si las condiciones no son óptimas.