La compañía Siemens Energy ha anunciado este sábado una oferta pública de adquisición (OPA) voluntaria en efectivo sobre la totalidad de las acciones de Siemens Gamesa Renewable Energy (SGRE). «Tras la plena integración, el Grupo combinado podría beneficiarse de sinergias de costes previstas de hasta aproximadamente 300 millones de euros anuales en un plazo de tres años. Además, se esperan también sinergias de ingresos por un importe de centenares de millones de euros para el final de la década», explicaba la nota publicada.
La noticia ha creado gran preocupación entre los empleados de la empresa, que actualmente tiene tres centros en la Comunidad Autónoma Vasca: Asteasu, Zamudio, y Mungia. Representantes sindicalistas de cada planta han expresado públicamente el malestar que crea el futuro incierto de los trabajadores.
Concretamente Mikel Irastorza, representante de LAB en el comité de empresa de la planta de Asteasu ha explicado que todavía no saben el efecto que tendrá la decisión sobre los trabajadores de Euskal Herria, pero refrenda que «viendo los antecedentes, cuando hablan de sinergias, siempre se pierden puestos de trabajo».
Irastorza teme que con la salida de la bolsa de la compañía, Siemens pretenda vender parte de la empresa. Fernández da por sentado que la sede «se quedará fuera de Euskadi y fuera de España y eso tendrá implicaciones también para los trabajadores».