El Gobierno Vasco ha presentado esta mañana el borrador del Plan de Contingencia Energética, que combina ayudas económicas dirigidas a administraciones, a la industria y a la ciudadanía con propuestas de acción alineadas con las medidas adoptadas por once países europeos.
La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, ha explicado que de acuerdo a la propuesta de Bruselas de reducir un 7 % el consumo de gas en el Estado español, Euskadi debería rebajar 1520 GWh (0,12 bcm) en ocho meses, una reducción que afectaría sobre todo a la industria y el refino, que son los grandes consumidores de gas de la CAV (consumen el 47 % del total). «Esto nos exige tomar medidas relevantes y tener un mecanismo alternativo, que pasa por más energías renovables o el hidrógeno verde», ha defendido.
«El mejor escudo de contingencia es fortalecer los programas de ayudas», ha explicado Tapia. Por ello, el plan cita los 17 programas de subvenciones, como la iniciativa MOVES para adquirir vehículos eléctricos, los destinados a la implantación de sistemas de energías renovables o las ayudas para rehabilitación energética de edificios. Además, las empresas cuentan con subvenciones específicas para aquellas afectadas por los altos precios de gas natural o las dirigidas a la industria intensiva en consumo de gas e incluso se está trabajando con el Departamento de Turismo para poner en marcha un programa de ayudas a proyectos de eficiencia energética de establecimientos turísticos. Asimismo, el plan incluye una nueva iniciativa de apoyo técnico para los ayuntamientos.
Arantxa Tapia ha subrayado que este borrador se trata de un «punto de partida», ya que a partir de ahora y hasta el 25 de agosto, las partes implicadas podrán analizarlo y hacer sus aportaciones.