Programas del Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco como Lehen Urratsa, Trapezistak e Irauli han logrado que la mayoría de las 586 personas sin hogar que están siendo atendidas en los diferentes refugios sociales desde hace dos años no regresen a la calle.
Por ejemplo, a causa de las restricciones socio-sanitarias impuestas por las autoridades para frenar el avance del virus y de las necesidades de las personas más vulnerables, el Gobierno Vasco impulsó entonces el fondo Inor Atzean Utzi Gabe, que constaba de diferentes programas específicos, entre ellos, Lehen Urratsa. Esta iniciativa proporcionó refugio a las personas que dormían en la calle durante el confinamiento y propició que se pudiera trabajar con ellas para evitar que regresaran al sinhogarismo; asimismo, mejoró su calidad de vida e impulsó su proceso de inserción social a través de un itinerario personalizado.
Asimismo, las iniciativas Irauli y Trapezistak están trabajando con 233 jóvenes sin red familiar o social que vivían en la calle. y, según las previsiones del Departamento de Artolazabal, en los próximos meses se podría llegar a las 300 personas. En ello están trabajando entidades como Agintzari o Peñascal Kooperatiba, que están proporcionando a estos chicos y chicas una ruta individualizada de integración, acompañamiento y formación.