Continúa la polémica por las rebajas de condena que acarrea la entrada en vigor de la llamada ley ‘solo sí es sí’. Después de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, denunciara la existencia de un prejuicio generalizado en el poder judicial contra las mujeres, la Asociación Profesional de la Magistratura ha exigido su inmediata dimisión.
Los jueces han aseverado que están «firmemente» comprometidos con la protección de las víctimas y que comporta el diligente cumplimiento de las obligaciones que resultan de aplicar la ley aprobada. Es más, la Asociación censura que se haya acudido a «descalificaciones generalizadas» basadas en estereotipos «en lugar de asumir con honestidad la posibilidad de que la norma pueda dar lugar a interpretaciones que puedan resolverse» y considera que resulta una actuación «totalmente reprobable por falsa e injusta».