La Audiencia de Gipuzkoa ha aplicado por primera vez la controvertida ley del ‘solo sí es sí’, estableciendo la pena mínima, dos años de cárcel, por un delito de agresión sexual cometido en Getaria en 2018 a una niña de 10 años. El condenado también tendrá que pagar 1.800 euros.
El hombre realizó tocamientos a la menor, hija de su pareja, en el domicilio familiar y en otra ocasión le mostró un video con contenido sexual explícito.
En este caso la pena sería la misma aplicando la legislación anterior o la ley de ‘solo sí es sí’.