El arranque del nuevo año ha traído consigo subidas y bajadas de precio en muchos productos y servicios, ya que además de la habitual actualización de tarifas, también han entrado en vigor diferentes medidas adoptadas por los ejecutivos estatales y autonómicos.
Por desgracia, los campos en los que los precios se han elevado son bastantes más que en los que ha ocurrido lo contrario. Claros ejemplos son la subida de las hipotecas, la subida regulada de la tarifa regulada del gas, la tarifas telefónicas al alza, los peajes, la gasolina ahora que se ha eliminado la bonificación de 20 céntimos…
No obstante, los consumidores podrán beneficiarse de la rebaja del IVA de productos básicos, que ya ha entrado en vigor. Se ha rebajado del 10% al 5% el IVA del aceite y la pasta durante seis meses y ha suprimido el gravamen superreducido del 4% que se aplica a alimentos de primera necesidad, como el pan o la leche. Quedan también exentos de este impuesto hasta el 30 de junio harinas panificables, quesos, huevos, frutas, verduras, hortalizas, legumbres, patatas y cereales. Asimismo, el Gobierno también ha bajado el IVA del 10% al 4% para los productos de higiene femenina, como tampones, compresas y protegeslips, así como para los preservativos y anticonceptivos no medicinales.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta la subida de las pensiones y del ingreso mínimo vital, así como la entrada en vigor de las nuevas cuotas de autónomos, que se rebajan para los trabajadores por cuenta propia que ganen menos de 1.300 euros, pero aumenta para aquellos que superen los 1.700 euros de ganancias mensuales.