Actualmente los contribuyentes españoles realizan un esfuerzo fiscal, referencia que relaciona los impuestosque se abonan y la capacidad económica, un 52% superior al de la media europea. Además, cabe destacar que el Instituto de Estudios Económicos (IEE), ‘think tank’ de la CEOE, subraya también que ninguna economía avanzada presenta un dato de esfuerzo tan elevado como el de España.
El IEEtambién pone la atención sobre un indicador propio: la presión fiscal normativa. Según esa referencia, España ha sufrido un notable retroceso en competitividad fiscal tanto en el último año como desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegó a Moncloa. «En la edición de 2021 la presión fiscal normativa, para España, se situó en 112,8 puntos, y para 2022 ha subido a 116,4 puntos; es decir, un incremento de 3,6 puntos en un solo año, lo que la coloca un 16,4% más elevada que la media de la UE. Desde 2019 la subida ha sido de 8,3 puntos, por lo que el incremento es continuado, con el pernicioso deterioro de la competitividad fiscal», explica el informe.