Los ministerios de Trabajo e Igualdad modificaron al mismo tiempo un mismo artículo de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, dejando la norma con dos redacciones distintas y, aparentemente, igualmente válidas.
A pesar de que ambas redacciones son similares tienen diferencias que no son menores. Por ejemplo, la Ley de Empleo, el Ministerio de Trabajo incluye entre los datos personales que no se pueden solicitar a los aspirantes a un empleo los relativos a la salud, una cuestión clave que no se recoge en la redacción dada por el departamento de Igualdad. Así, el caso muestra una falta de coordinación entre los dos ministerios, que modificaron una misma disposición en dos leyes que se estaban tramitando en paralelo.