La Diputación Foral de Gipuzkoa ha adjudicado a la entidad Arbesko Egoitza la elaboración del proyecto de la nueva residencia de Arbes en Irun. La construcción de la infraestructura tendrá un plazo de ejecución de 24 meses y su gestión durante 22 años. Según los plazos establecidos en el contrato, se prevé que la obra comenzará a finales de 2023, y que la residencia esté en marcha en 2026.
Tal y como ha explicado la portavoz foral, Eider Mendoza, «Gipuzkoa está inmersa en la transformación de su modelo de atención y cuidados para las personas mayores, y la residencia de Arbes hará una aportación de un grandísimo valor para extender esta apuesta y materializar la transición hacia los cuidados del futuro».
El nuevo centro social de Arbes contará con 130 plazas residenciales para personas mayores en situación de dependencia, de las cuales 15 conformarán una unidad psicogeriátrica, y las demás estarán organizadas en reducidos módulos convivenciales y mayormente en habitaciones individuales. Además, fruto de la firma del convenio con el Ayuntamiento de Irun, que cedió la parcela a la Diputación, financiará 54 plazas de apartamentos tutelados, ámbito que es de competencia municipal, diseñados para su destino preferente a personas mayores con dependencia de grado I. La nueva residencia dispondrá igualmente de 30 plazas de centro de día para mayores en situación de dependencia, así como 26 plazas de apartamentos con apoyos para personas con discapacidad, y 25 plazas de centro de día para personas con discapacidad.