De acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el INE, la inflación anual estimada del IPC en mayo de 2023 es del 3,2%. En caso de confirmarse este avance, supondría una disminución de nueve décimas en su tasa anual, ya que en el mes de abril esta variación fue del 4,1%.
Esta evolución es debida, principalmente, al descenso de los precios de los carburantes, que aumentaron en mayo del año anterior. También influye, aunque en menor medida, que la subida de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas ha sido menor que en mayo de 2022.
En cuanto a la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye cinco décimas, hasta el 6,1%