Bidelagun ha conseguido revocar el alta médica de una trabajadora de Educación con COVID-19 persistente. El Juzgado de lo Social número 3 de Donostia ha dado la razón a esta fundación creada por la central sindical ELA y ha declarado indebida el alta médica emitida por el INSS a una profesora de Educación Especial del Gobierno Vasco aquejada de esta enfermedad.
La resolución judicial condena al INSS a que continúe abonando a la trabajadora la prestación económica y asistencia sanitaria correspondiente hasta su curación, o bien hasta que se declare afecta de una incapacidad permanente.
La sentencia se hace eco también del cuadro clínico de la trabajadora, mucho más complejo de lo que el INSS consideró para darle el alta. Así, los hechos probados de la sentencia indican que la trabajadora “al tiempo del alta médica continuaba presentando la misma sintomatología de COVID-19 persistente posterior que determinó su baja laboral. Que presentaba malestar general, astenia y dolores diversos a nivel de columna cervical, hombros, coxis, garganta y oídos. Que también sufría cefaleas, taquicardias, mareos, cansancio e insomnio, escaso apetito, temblores en mano y desarreglos menstruales. Que sufría falta de concentración y bloqueos de memoria, habiendo recibido un seguimiento médico por el servicio de cardiología, respiratorio, neurología, traumatología y rehabilitación”.
Bidelagun Fundazioa ha llevado la dirección jurídica de este caso y valora muy positivamente esta sentencia, ya que la misma ayuda a visibilizar al colectivo de personas afectadas por esta enfermedad y su problemática concreta, al tiempo que permite articular respuestas jurídicas para mejorar la situación vital de las personas afectadas por COVID-19 persistente.