Una sentencia condena al exsumiller del Mugaritz, Guillermo Cruz, a dos años de cárcel por apropiarse indebidamente de botellas de vino de alta gama de dicho restaurante. Además, le impone la obligación de indemnizar al establecimiento con 22.487 euros.
La resolución judicial considera ahora que el sumiller “no estaba autorizado a vender las botellas de vino del restaurante en beneficio propio”, a pesar de lo cual “llevó a cabo ventas de distintos lotes”, cuyos importes fueron ingresados en una cuenta bancaria “de su titularidad exclusiva”.