Si ya a últimos del mes junio Eguzki Erakunde Ekologista denunciaba un vertido ilegal de residuos a escasos 100 metros de la iglesia de Zestoa, en la carretera que conduce a los barrios de Arro Goia y Ibañarrieta y otro partiendo de la misma iglesia siguiendo una pista de gravilla a unos 900 metros hacia Aizarnazabal, esta vez viene a denunciar otros dos vertidos en el mismo barrio, con la diferencia de que estos vertidos no han afectado al sistema fluvial, tal y como sucedió con los anteriores, donde gran parte de los residuos fueron vertidos a varias regatas.
Uno de los vertidos se a producido en el mismo lugar, a 100 metros de la iglesia. Entre otros, varias bolsas repletas de residuos domésticos y sacos de mortero que sirven para aparejar elementos de construcción. Generalmente, se utilizan para obras de albañilería.
El siguiente vertido se encuentra a 300 metros del anterior, carretera a los barrios de Arroa Goia e Ibañarrieta, a la izquierda, detrás de una parada de autobús, en una zona que sirve de aparcamiento de vehículos. La mayoría son escombros. En menor medida, también, tiras de persianas y sacos de tela blanca rellenos de papel pintado para las paredes. Asimismo, pequeños fragmentos de tuberías de uralita (recordar que la uralita está clasificada como residuo peligroso por su contenido en amianto). Todo ello indica que es muy probable que estos residuos procedan de obras menores de construcción y reparación domiciliaria.
De conformidad con lo establecido en la Ley 22/2011, de 28 de julio, está prohibido el vertido o eliminación incontrolados de residuos. Corresponde a las Entidades Locales el ejercicio de la potestad de vigilancia e inspección, y la potestad sancionadora en el ámbito de sus competencias.
Por ello, Eguzki solicita al Ayuntamiento de Zestoa y a la Mancomunidad de Urola Erdia la restauración de la zona y que investigue estos hechos.