Investigadores chinos han logrado crear embriones quiméricos que contienen una combinación de células humanas y porcinas. Así, se han desarrollado embriones de cerdo cuyos riñones contenían un 50–60 % de células humanas y que, tras 28 días de gestación en ese animal, mostraban una estructura normal para su fase de desarrollo.
Esta es la primera vez que los científicos logran cultivar un órgano sólido humanizado dentro de otra especie, aunque estudios anteriores habían utilizado métodos similares para generar tejidos humanos como sangre o músculo esquelético en cerdos.