Tras reconocer el déficit de profesionales sanitarios y las largas listas de espera que hay actualmente en Osakidetza, el Lehendakari se ha comprometido a reducir la demora en los próximos seis meses.
Así, Urkullu ha planteado recuperar los 65 días de demora media en intervenciones quirúrgicas, bajar de los 30 días de espera para pacientes oncológicos y disminuir de los 90 días para cirugías cardíacas.
En cuanto a la Atención Primaria, se ha comprometido a «bajar en los próximos seis meses de las 48 horas de espera y elevar la presencialidad del 61% actual al 70%, logrando un mayor equilibrio entre citas telefónicas y presenciales». Para lograr esos objetivos, el Lehendakari ha comunicado que se realizará una inversión de 1200 millones de euros en ocho años «para renovar Centros de salud y adquirir nuevos equipamientos médicos».