El Departamento de Salud y Osakidetza han completado la renovación completa de la flota de mamógrafos de última generación, muy necesaria para la detección precoz del cáncer de mama. Así se facilita poder tratar a tiempo esta enfermedad y aumentar el pronóstico y la calidad de vida de las mujeres afectadas.
El Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama se puso en marcha hace 28 años y ha permitido -hasta el pasado 30 de junio de 2023- detectar más de 12.300 cánceres en las más de 2,5 millones de mamografías realizadas en este tiempo. La mayor parte de los cánceres detectados han sido, afortunadamente, en estadios precoces, permitiendo llevar a cabo tratamientos más eficaces y menos agresivos.
A pesar de que la incidencia de la enfermedad se incrementa, la supervivencia sigue aumentando en Euskadi, por lo que el impacto de esta enfermedad se reduce. Todo ello gracias a la detección precoz y a la aplicación de tratamientos cada vez más personalizados, más eficaces y con menos efectos secundarios, ofreciéndose la mejor opción diagnóstico-terapéutica a las mujeres afectadas y facilitando asimismo la coordinación entre diferentes recursos asistenciales de Osakidetza. Es importante recalcar que la tasa de supervivencia es mayor en mujeres diagnosticadas en edad de cribado (50-69 años), presentado en el último periodo evaluado una tasa del 92,7% a los cinco años del diagnóstico.