A pesar de que el Ministerio de Sanidad ha impuesto el uso de mascarillas en centros de salud, el Gobierno Vasco no apoya la decisión, por lo que ha decidido recurrir la orden. Es más, considera que se vulnera la legalidad y se invaden competencias que son exclusivas de las Comunidades Autónomas.
El Gobierno Vasco entiende que el Ministerio de Sanidad está utilizando un recurso legal absolutamente extraordinario, sin cumplir sus propios preceptos, para imponer su voluntad a la mayoría de las Comunidades Autónomas, en contra del criterio técnico de estas, y vulnerando sus competencias en materia de salud pública.
Entiende el Gobierno Vasco que «el Ministerio de Sanidad ha sentado un precedente gravísimo en la relación política y administrativa que ha de mantener con las Comunidades Autónomas y sus departamentos de salud». El Ministerio de Sanidad tienen reconocidas competencias en materia de salud, pero las Comunidades Autónomas son quienes asumen la responsabilidad de la gestión y la atención sanitarias. Por eso, «es incomprensible que el Ministerio, sin causa que lo justifique, sin acogerse al cumplimiento de la legalidad y en contra de la opinión de los expertos, haya ignorado las propuestas de consenso que han trasladado algunas comunidades, entre ellas Euskadi, y haya el elegido la confrontación como forma de relacionarse con las Comunidades Autónomas», explica.
En consecuencia, el Gobierno Vasco hará cumplir, mientras esté vigente, la medida, pero presentará recurso contra la misma ante la administración de justicia en los términos que sus servicios jurídicos determinen.