Este fin de semana, un varón de 26 años de edad fue interceptado por la Ertzaintza cuando circulaba en un vehículo en el que fueron localizadas diversas cantidades de sustancias estupefacientes y más de 800 euros en metálico. Asimismo, el conductor dio positivo en el test de drogas que le realizaron los agentes.
Los hechos sucedieron a medianoche. Una patrulla no uniformada de la Ertzaintza que realizaba funciones de protección ciudadana por el municipio de Irun observó cómo un individuo, que portaba dos botellines de cerveza en las manos, se montaba en el puesto del conductor en un vehículo incorrectamente aparcado con los intermitentes puestos.
De inmediato, inició la marcha, siendo seguido por la dotación policial. En una calle cercana se paró junto a un portal, donde se le acercó una mujer a la que le hizo entrega de una bolsita, reanudando de nuevo la conducción y llegando a saltarse un semáforo en fase roja. Por estos motivos, finalmente fue interceptado en la carretera GI-636.
En el coche viajaba también una mujer, procediendo a la identificación de ambos. El conductor portaba entre sus pertenencias diversas sustancias estupefacientes distribuidas en varias bolsitas, presumiblemente conteniendo cocaína, marihuana y éxtasis, junto con utensilios para el consumo de drogas, además de 480 euros en billetes de diferente cuantía. En una puerta del coche, fueron hallados otros 350 euros.
El implicado, que también arrojó un resultado positivo en el correspondiente control de detección de drogas, fue detenido por un presunto delito contra la salud pública. A la mujer, que le fue incautada una bolsita con una sustancia en polvo de color rosa, se le incoó la pertinente acta de sanción por la Ley de Seguridad Ciudadana.