Las fuertes lluvias de los últimos días produjeron este fin de semana el desprendimiento de una ladera en Hondarribia. El incidente ocurrió sobre las 02:30 de la madrugada y obligó a desalojar dos viviendas y a cortar la carretera GI-3361 en ambos sentidos.
A pesar de que posteriormente se decidió que los vecinos de la vivienda más alejada del desprendimiento pudieran volver a su casa, los de la casa más cercana no han podido hacerlo, por lo que que tendrán que esperar a que terminen las labores de limpieza de la zona y se haga una nueva valoración.
En cuanto a la carretera GI-3361, permanecerá cerrada entre dos y tres meses, tiempo estimado para limpiar y acondicionar la zona.
El Ayuntamiento de Hondarribia ha pedido a la ciudadanía que no intenten acercarse a la zona y ha explicado que para garantizar la circulación se ha instalado un semáforo en la calle Pierre Lhande, desde donde se puede subir a las inmediaciones del Faro de Higer.
«Los vecinos del inicio de Higer Bidea no tendrán problemas para dirigirse a sus casas, ya que la carretera se ha cerrado justo a la altura del desvío para subir al campo de tiro de San Telmo. En cambio, los residentes en los alrededores del Faro de Higer tendrán que bajar por la calle Pierre Lhande para llegar a la calle Ramón Iribarren», han explicado desde el Consistorio.