El partido de fútbol que se celebró el pasado 3 de octubre en el Reale Arena entre la Real Sociedad y el Anderlecht era un evento considerado de «alto riesgo» por Ertzaintza y Guardia Municipal de Donostia, y no fue para menos.
Finalmente la UEFA ha confirmado la decisión de sancionar al club belga por estos hechos, por lo que el Anderlecht no podrá vender entradas a sus aficionados en los próximos tres partidos a domicilio. Además, se le ha impuesto una multa económica de 60.000 euros tras responsabilizar al club de lanzamiento de objetos, incidentes de público y daños causados en el estadio Reale Arena o sus instalaciones.