A pesar de la contaminación provocada por una fuga de gasoil vertido del yate de 14 metros de eslora hundido ayer en la bahía donostiarra, los resultados de los últimos análisis llevados a cabo por el departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de San Sebastián han confirmado que no hay rastros de combustible en el agua. En consecuencia, la bandera verde ha sustituido a la roja, permitiendo así el baño en las playas de la Concha y Ondarreta.
Además, el ayuntamiento ha comunicado que el barco ha sido a trasladado a un lugar seguro.