A pesar del ambiente inmejorable vivido en las etapas del Tour de Francia que han recorrido Euskadi, ha habido varios incidentes que han ensombrecido el evento.
Por un lado, casi una hora después de que la primera etapa partiera desde Bilbao la Ertzaintza localizó e identificó como investigados a 11 personas en la carretera BI-2713 en el Alto de Morga, en Bizkaia, cuando llevaban unas cadenas con la intención de interrumpir la carrera.
Por otro lado, en la segunda carrera varios ciclistas sufrieron pinchazos en las ruedas de sus bicicletas debido a chinchetas que aparecieron en el tramo guipuzcoano, en la zona de Oiartzun.
Por último, en la tercera etapa que tuvo lugar ayer hubo un tercer intento de sabotear el evento utilizando el mismo sistema que el día anterior: el lanzamiento de chinchetas. En consecuencia, los corredores volvieron a sufrir pinchazos, esta vez a la altura de Donostia.
La Ertzaintza está al tanto de todos estos hechos y ha iniciado una investigación para esclarecer lo ocurrido.