Es posible que hayas hecho una tortilla de patata y te hayan sobrado algunas raciones. Ante esta situación, Karlos Arguiñano propone una receta de aprovechamiento rápida y sencilla: tortilla guisada.
«Si metéis la tortilla en una salsa que hagáis vosotros mismos, conseguiréis que siga siendo igual o más jugosa que la receta original, y le estaréis dando una segunda vida fantástica», explica el cocinero.
La salsa que ‘bañe’ vuestra tortilla puede ser de tomate, salsa española, salsa verde, pepitoria… la que queráis. Karlos Arguiñano no proporciona una receta para que no tengamos que darle muchas vueltas: hacer una salsa de tortilla con tres dientes de ajo, aceite de oliva virgen extra, azafrán (10 hebras), 100 ml de vino blanco y caldo (500 ml). Y cuanto antes la mezcles con las sobras, mejor y más tiempo aguantará.