Santi Villa es un profesor de Primaria que ha compartido en sus redes sociales la lección que le dio a una clase en la que un alumno respondió «que lo recoja la limpiadora» cuando pidió a los niños que recogiesen un papel del suelo.
En ese momento se le ocurrió hablar con la limpiadora, de nombre Clementina, para que ella pusiera una nota del uno al 10 en la pizarra, según cómo hubiesen dejado la clase. Además, les dijo a los niños que «si conseguían en una semana cuatro 9 o 10», los viernes darían una clase en el patio.
A partir de ahí se creó un vínculo especial entre Clementina y los alumnos. «El primer día que teníamos nota, la clase llegó emocionada para verla. A partir de ahí, empezaron a dejar en la pizarra notas, preguntas, agradecimientos … y siempre le dejaban un 10 por lo bien que nos dejaba el aula», explica Santi.
“Que lo recoja la limpiadora”
En el año de la pandemia, tuve la suerte de ser tutor de una clase única y maravillosa.
Año complicado en el que acabamos el curso sin poder celebrar la graduación o el viaje de fin de curso.
Pero los meses que estuve en esa clase fueron inolvidables— Santi Villa (@soyunsanti) October 6, 2024