Los incidentes que los ultras del Anderlecht causaron en el Reale Arena durante el partido de la UEFA Europe League disputado la semana pasada frente a la Real Sociedad siguen coleando.
Ahora, el grupo de ultras Mauves Army 2003 del equipo belga ha pedido sus «más sinceras disculpas» por lo ocurrido, ha condenado «firmemente» el comportamiento de varios de sus seguidores y ha anunciado que tomarán «las medidas necesarias para garantizar el futuro del grupo».
«El pasado jueves fracasamos como colectivo en el control del comportamiento de ciertos miembros de nuestro grupo (…) perdimos el control. La estupidez prevaleció ante la razón», explica el texto publicado en sus redes sociales.
Cinco miembros del grupo radical fueron detenidos acusados de desórdenes públicos y resistencia a la autoridad por lo ocurrido en Donostia.