Ante las dificultades legales para la regulación específica de las autocaravanas, el Ayuntamiento de San Sebastián ha optado por «extremar» el control del uso que hacen las autocaravanas del espacio público de la ciudad, «siendo especialmente riguroso en el cumplimiento de la Ordenanza de Civismo y las medidas de regulación de estacionamiento, además de trabajar en otras medidas pedagógicas con las personas usuarias de vehículos-vivienda».
Según explica el consistorio de la capital guipuzcoana, «el refuerzo en el control de este tipo de vehículos, que se acentuará en la temporada estival, obedece a los problemas de convivencia que se dan en determinados puntos de la ciudad y la imposibilidad legal de regular su circulación y estacionamiento por uso o tipología».