El viernes de la pasada semana, la Ertzaintza, volvía a detener a un hombre de 45 años, líder de una banda dedicada a los robos con fuerza en establecimientos de Euskadi y en ciudades y poblaciones cercanas.
Es su tercera detención desde 2013 y en esta ocasión se le relaciona con el robo de un coche en Araba y de tres establecimientos en Navarra.
Las investigaciones se iniciaron tras el conocimiento del robo de un vehículo en la localidad alavesa de Arraia-Maeztu. La investigación permitió relacionar el robo del turismo con tres asaltos con fuerza en establecimientos comerciales y de servicio de Navarra.
El operativo llevado a cabo por el SITCG de la Ertzaintza el pasado viernes llevó a detención de ese hombre de 45 años y a la recuperación del vehículo que fue utilizado después en la comisión de, al menos, tres robos con fuerza en establecimientos de las localidades navarras de Zugarramurdi, Urdazubi y Legasa.
En las horas posteriores a la detención los agentes practicaron dos registros en busca de efectos relacionados con la actividad ilícita del detenido. El primero de ellos en una vivienda de Errenteria y el segundo en un garaje cerrado, alquilado por el sospechoso, ubicado en la localidad de Usurbil. En ambos lugares fueron localizados diferentes efectos de valor procedentes al parecer de asaltos con fuerza. La investigación permitió también recuperar una furgoneta sustraída hace un año en el municipio alavés de Valle de Arana, y que puede tener relación con la actividad ilegal del ahora arrestado.
En los últimos años este individuo ha sido detenido en otras dos ocasiones por como líder de un grupo criminal dedicado, principalmente, a la sustracción de vehículos y su posterior uso en la comisión de robos con fuerza en zonas rurales de la Euskadi y comunidades limítrofes. Concretamente en los meses de agosto de 2013 y febrero de 2014, el grupo fue desarticulado por la Ertzaintza en dos operativos denominados “Kaiku” desarrollado en Lasarte y Donostia respectivamente.
En el primero de ellos se imputó a los integrantes del grupo la sustracción de un total de 28 vehículos, siendo todos ellos recuperados, y más de un centenar de robos con fuerza. Los ladrones utilizaron los vehículos sustraídos para desplazarse y cometer los delitos en establecimientos como estancos, sociedades gastronómicas o centros sociales ubicados en zonas rurales y de montaña.
La gran mayoría de sus delitos se cometieron en las zonas del Goierri, Tolosaldea, Hernani, Oñati, Legazpi y otros núcleos rurales de Gipuzkoa, municipios de la montaña alavesa o próximos a Navarra, y en la zona norte, la Sakana y el entorno de Estella, dentro la Comunidad Foral.
El segundo operativo que logró un nuevo desmantelamiento de la banda permitió la recuperaron de doce vehículos sustraídos y a los arrestados se les imputaron más de medio centenar de robos.