El dispositivo funcionará hasta el 1 de abril de 2018 y se reforzará el número de plazas de forma indeterminada las noches en las que haya previsión de fenómenos adversos y heladas en la costa.
El Ayuntamiento de Donostia ha activado el dispositivo invernal para la atención de urgencia a personas sin techo en situaciones de previsión de frío extremo. Este dispositivo funcionará hasta el 1 de abril de 2018 y reforzará en un número indeterminado de plazas el servicio para personas sin techo que ofrece durante todo el año el Ayuntamiento.
Las 80 plazas existentes en el Abegi Etxea y el Gaueko Aterpea, se ven reforzadas dependiendo de las necesidades a través de la adecuación de dos salas en el propio Abegi Etxea, donde se instalan alrededor de otras 40 camas para acoger a personas que pernoctan en la calle.
Este dispositivo requiere la coordinación de diferentes departamentos municipales como Acción Social, Guardia Municipal, Protección Civil, además de SOS Deiak, Osakidetza y diferentes asociaciones que trabajan con personas que viven en la calle. De tal modo que, en caso de aviso por heladas en la costa informan a las personas sin hogar que tienen localizadas de que se procederá a la apertura del servicio, en el que pueden pasar la noche y donde personal del departamento de Acción Social les atiende con bebida caliente y, en caso de necesidad, ropa limpia.
Además, para los casos en los que se identifica a personas sin hogar en la calle y se niegan a acudir a los servicios existentes, la Guardia Municipal realizará una primera valoración de la situación y, en caso de existir peligro para la vida de esa o esas personas, contacta con el servicio de Urgencias de Osakidetza, que confirmará la situación con un médico, y procederá al traslado al Servicio de Puertas Abiertas.
El año pasado, el dispositivo se activó siete días entre el 15 de noviembre de 2016 y el 1 de abril de 2017, en los que alrededor de 100 personas utilizaron el Servicio de Puertas Abiertas. Un recuento realizado en toda la Comunidad Autónoma Vasca en octubre del 2016, localizó en Donostia 44 personas que pernoctan en la calle.