Un hombre llamado Markiko Sonnie Lewis, de 40 años, robó en una pequeña sucursal de un banco de Cleveland (Ohio) el pasado 12 de abril, justo un día después de conseguir la libertad tras haber sido condenado por atracar con anterioridad ese mismo lugar.
Sonnie Lewis había sido condenado en 2016 a dos años de prisión, y se le impusieron tres años de libertad condicional, después de que fuese puesto en libertad el pasado 11 de abril. Un día después, fue detenido nuevamente por robar en el mismo banco.
Ahora, el acusado se enfrenta ahora a una pena de 20 años de prisión por robo «con fuerza, violencia e intimidación». Se le atribuye el robo de 1.044 dólares del banco, según la oficina del fiscal federal.