El Museo de Wiesbaden inauguró ayer una exposición de Eduardo Chillida compuesta por un centenar de piezas, que explora la vinculación del artista con Alemania.
Esta “gran retrospectiva” sobre el escultor donostiarra permanecerá abierta hasta el 10 de marzo. En total son 100 las obras de todas sus épocas las que se encuentran expuestas en la pinacoteca, montaje que ha sido supervisado por Ignacio Chillida, hijo del artista.
El alcalde de Donostia, Eneko Goia, aterrizó ayer por la tarde en Wiesbaden, localidad alemana hermanada con Donostia desde 1981, con motivo de la inauguración de esta exposición.