Al término de las tres sesiones del juicio celebradas contra el tatuador de Donostia acusado de abusar sexualmente de una docena de mujeres, éste ha sido puesto en libertad a la espera de que se dicte sentencia.
El tatuador ha estado en prisión provisional en Martutene desde el 9 de febrero. Ahora, el magistrado ha valorado que el inculpado haya cumplido ya un año y ocho meses de prisión, por lo que ha decidido dejarlo en libertad.